lunes, 22 de agosto de 2016

3 PASOS PARA CRECER EN PAREJA





3 PASOS PARA CRECER EN PAREJA
Cuando uno se enamora, todo parece ser bello perfecto y agradable, mientras más enamorado se está menos defectos puede percibir uno en el otro, de modo que llegamos a pensar que ese otro, que esa persona en especial  no posee defectos, nada más alejado de la verdad. El enamoramiento es la primera fase del amor maduro que con los años y la convivencia se va gestando, pero no lo es todo. Enamorarse o estar enamorado es el génisis del amor, pero no lo es todo. Para que nuestra reacción crezca más allá del simple enamoramiento tenemos que crecer en el amor, y para ello podemos dar los tres primeros pasos, hay mucho otros pero es necesario tener un punto de partida.


1      1     RECONOCE LAS DIFERENCIAS

Hombres y mujeres son iguales en derechos y en dignidad, el uno no es más que el otro ni viceversa eso es una verdad, pero eso no quiere decir que somos exactamente iguales, hay cosas que nos diferencian y son precisamente esas diferencias lo que hacen tan llamativos a los unos para los otros. No solo son las diferencias físicas que resultan obvias a primera vista, hay diferencias más profundas tejidas en lo íntimo de cada uno que hace que aunque seamos de la misma especie no seamos exactamente iguales. Si deseas enrumbar tu relación de pareja debes empezar por entender que él o ella no es igual a ti, no piensa como tú, no le gusta exactamente todo lo que te gusta a ti, y no percibe el mundo de la misma manera. Los grandes problemas de parejas surgen precisamente porque queremos que el otro sea como yo y eso es imposible, cada persona es única, incluso los hermanos nacidos de los mismos padres, creciendo bajo el mismo sistema de crianza terminara por ser distintos, semejantes sí, pero no exactamente iguales. ¿Quieres que tu relación de pareja mejore? Pues entiende que él o ella, no es igual a ti, sus capacidades, sus dones, sus limitaciones, sus debilidades, sus fortalezas, su inteligencia, sus estados de ánimo, e incluso sus sentimientos  y los tuyos no son los mismos. Tu pareja No es tu igual, es tu complemento. Reconocer las diferencias que entender que el otro es aquello que yo no soy, y para crecer en pareja es necesario tener claro esta realidad, los dos no pueden hablar al mismo tiempo es necesario que uno hable y el otro escuche. Debemos luchar por ser cada día más complementarios. Imaginemos la relación de pareja como un rompecabezas en la que cada uno va colocando sus piezas, en donde una pieza tiene una cavidad, la otra es sobresaliente pero, al juntarlas se hacen una pieza perfecta. Reconoce que no es tu igual sino  tu complemento, Dios la hizo para ti. Dios lo hizo para ti, no para que fuese exactamente como tu sino, para que fuese eso que tú no eres, de modo que al hacerse una sola carne sean verdaderamente felices

     2      RECONOCE TUS DEFECTOS
Ya hemos dicho que el enamoramiento afecta nuestra percepción del otro, lo vemos perfecto, la creemos perfecta, pero la realidad es que  él o ella no es así, realmente ningún ser humano lo es, como tampoco las parejas son perfectas, ese no es más que un mito creado por Hollywood para vendernos sus películas. Este paso no se trata de sentarnos aquí a enumerar los defectos que vemos en el otro ahora que nuestro amor pasó del simple enamoramiento a la convivencia. Sería muy fácil hacer una lista de las cosas malas que tiene el otro, sería fácil,  pero no sería provechoso, en este caso la intención es dirigir el radar hacia nosotros mismos, tenemos que esforzarnos por descubrir nuestros propios errores, nuestras fallas, nuestras debilidades y entender que a veces eso que yo hago, eso que yo digo, eso es lo que está dañando mi relación. Cada uno al llegar a la relación de pareja carga consigo una maleta llena de cosas de su pasado que le afectan en su interior; estas pueden ser: fracasos relaciones anteriores, miedos, fobias, heridas, malacrianzas, malas costumbres, rencores, odios, complejos y otra multitud de cosas que pueden estar dentro de esa maleta que nos trajimos desde nuestro pasado y que pueden estar dañado hoy nuestra relación de pareja y nuestro trabajo es identificar esos defectos en nuestras personalidad, pero para ello hemos de lanzar una mirada retrospectiva sobre nuestra propia vida. Puede ser que nuestros padres nos sobre protegieron y a raíz de eso crecimos inseguros de modo que cuando mi pareja necesita que yo le brinde seguridad no la encuentra y se siente decepcionado y la culpa no es de él o ella, sino nuestra, pues no hemos aprendido a sanarnos de aquella carencia. Puede ser que tengamos un carácter horrible, producto de que en nuestra infancia no se nos dio el amor que necesitábamos y ahora no sabemos expresar nuestros sentimientos y esa incapacidad este dañando a nuestra pareja que necesita de nuestro cariño. La idea es que descubras en lo profundo de tu ser que las heridas de tu pasado afecta tu presente, reconoce tus defectos, reconoce que no eres perfecto, reconoce que en tu forma de ser, de pensar y de hacer las cosas no eres admirable, es obvio que hay cosa que haces muy bien pero hay otras tantas que no las haces, y son esas la que precisamente dañan tu relación. ¿Qué hay en ti que deberías cambiar ya? ¿Qué hay en ti que causa dolor, molestia, infelicidad e incluso lágrimas en tu pareja? Es necesario que te des cuenta que tus defecto alejan de ti a esa persona a la que amas y la que seguramente te ama y aun más de lo que crees. Es necesario que te des cuenta de eso, pues cuando uno es sincero consigo mismo y es capaz de verse realmente como es, descubre la grandeza del amor que el otro siente por uno. Atrévete a ver tus defectos y te sorprenderá saber cómo es posible que alguien te ame sabiendo lo imperfecto que eres. Descubre tus defectos y te darás cuenta del amor inmenso que tiene tu pareja para ti que aun sufriendo por causa de tus defectos sigue a tu lado amándote y soportándote. Hazlo ahora, no sea que mañana sea muy tarde.


     3     TRABAJA PARA SUPERERLOS
Una cosa es saber que se es flojo y otra muy distinta es hacer algo que quite de tu vida la flojera. Es necesario pasar del mundo de las ideas al mundo de las acciones. Cada defecto que tenemos es un estorbo que nos aleja del amor de nuestra vida. Tu pareja es el amor de tu vida, no es perfecto (a) pero es el amor de tu vida, y tus defectos te alejan de él o ella y es necesario que trabajes para  acortar la distancia y superar esos obstáculos que nos hemos encargado de sembrar en el camino, pues detrás de esos obstáculos tu amor te espera y él o ella vale el sacrificio. ¿Te has preguntado alguna vez porque tu mama te dio a luz si dar a luz duele tanto? Pues porque más allá de las incomodidades el embarazo, más allá del dolor del parto estabas tú, y por amor a ti bien valía la pena soportar ese dolor. Las cosas valiosas necesitan de sacrificios, lo que realmente es importante requiere de nosotros nuestro compromiso, nuestra dedicación y sobre todo nuestro esfuerzo. Imagino que para este momento has enumerado algunos de tus defectos, (si no lo has hecho ¿qué esperas?) pues es necesario que te comprometas contigo mismo a trabajar por superarte a ti mismo. Y esto plantea sin duda alguna el reto más difícil de toda tu vida. Competir  contra otros, eso es sencillo, competiste con 20.000.000 de espermatozoides para poder fecundar el ovulo que te hizo ser humano y es obvio que ganaste, competir con otros y ganar es misión cumplida, lo que ¿verdaderamente cuesta es luchar contra nosotros mismos, eso sí que es otro nivel de lucha, pero es el nivel que debes superar para traer la felicidad a tu relación de pareja. No seas como Adán no le eches la culpa a los problemas de relación a tu mujer, ella obviamente tiene responsabilidades, pero no le eches la culpa, asúmela tu y trabaja por corregirte, no seas como Eva que culpo al demonio de sus errores, sin duda alguna el demonio mete su cola pero asume tus errores y lucha por corregirlos y la paz de Dios brillara sobre tu familia. Lucha, si lucha, pero entiende que un defecto que has tenido toda tu vida no se irá solo con desear que se vaya. Tienes que ejercitar tu voluntad, supongamos que te gusta criticar a tu pareja, que consciente o inconscientemente cada día le buscas los defectos a todo lo que hace, le reclamas porque no te mira, porque no te abraza, porque no te demuestra su cariño, pues bien eso de nada sirve, toca luchar contra eso pero ¿cómo hacerlo? Pues bien una solución puede ser darte cuanto que quizás él o ella no es cariñosa porque no sabe serlo y eres tú quien debe enseñarle, no reclamándole, sino siendo cariñoso. Recuerda que  tú eres su complemento, lo que la completa. Si tu defecto es la bebida piensa que por cada trago que te tomas ella se aleja un poco más de ti, y que si sigues así un día la (o) perderás para siempre, de modo que cada vez que te niegues a ti mismo un trago sepas que eso te acerca a ella. Mientras más te esfuerces por trabajar en la superación de tus defectos más cerca estarás de mejorar tu relación de pareja. Habrán reveces, caídas y recaídas, pero no dejes de luchar. No permitas que por causa de tus carencias pierdas el don que Dios te ha dado, al tener una persona en tu vida que completa lo que eres, que es capaz de soportarte, que es capaz de estar  a tu lado, y que te ama incluso más que a sí mismo. Lucha mientras tiene alguien por quien luchar



Paz y bien

En otra entrega seguiremos abordando otros pasos.

Dios te bendiga

viernes, 5 de agosto de 2016

TRES TIPOS DE PENSAMIENTOS QUE NOS HACEN DAÑO



TRES TIPOS DE PENSAMIENTOS QUE NOS HACEN DAÑO

Pensar en
Lo que pudo haber sido y no fue:

       A veces renunciamos a nuestros sueños, o a mitad de camino nos distraemos y terminamos haciendo algo que no era lo que pensábamos hacer, vamos postergando indefinidamente aquello que deseábamos realizar o le hacemos caso a agentes externos que a nuestro deseo interior y cambiamos de rumbo. Las razones pueden ser internas o externas, el miedo al fracaso, la falta de preparación, la incapacidad para recuperarnos de los reveses por un lado, el ruido de aquellos que viven a nuestro alrededor que apaga la voz de nuestros sueños, las circunstancias de la vida; (enfermedades, muertes problemas) por otro lado. En fin por una razón u otra no hicimos aquello que queríamos y terminamos llenos de pensamientos que remuerden la conciencia; pensamientos como: yo pude haber sido yo pude haber ido yo pude haber aprendido hace que pasemos el tiempo pensando en algo que pudo haber sido y no fue y esto termina quitándole el sabor a nuestra vida, nos hunde en el pesimismo y nos hace buscar culpables que carguen con el peso de nuestro errores de pasado. Lo que pudo haber sido y no fue es algo irreal, solo existe en las suposiciones, en los sueños frustrados. Si pasas la vida pensando en eso que nunca se dio, jamás valoraras lo que si se dio, lo que si lograste, lo que si tienes. De nada vale perder tiempo en lo que pudo haber sido y no fue. Es mejor invertir tiempo en disfrutar de los logros mientras se asume la responsabilidad de los errores del pasado.


Pensar en
Lo que fue pero ya no es 

       Otro tipo de pensamiento devastador es pensar en lo que ya no está, en lo que hemos perdido. Una cosa es conservar los buenos recuerdos de las cosas bonitas que nos da la vida y otra muy distinta es castigarnos contantemente por aquello que era pero que ya no es. Las cosas humanas acaban, todo lo humano tiene fecha de caducidad incluso las cosa más deliciosas y agradables de la vida llegado su tiempo tocaran a su final. Perder tiempo pensando en la juventud que ya hemos perdido, en la delgadez que dejamos atrás hace muchos kilos, en los amores perdidos, en el dinero gastado, en el tiempo que ya se fue nos hace infelices. Si alguna situación de tu vida llegó a su fin. Pues no queda más que seguir adelante y aprovechar las nuevas oportunidades que la vida nos brinde. Imaginemos que alguien nos regaló el helado más delicioso del mundo con todos los sabores preferidos por nosotros pero solo queda una cucharadita de helado en el recipiente, ¿qué podemos hacer? ¿Quejarnos porque se ha acabado o agradecer a la vida por el hecho de que pudimos disfrutarlo? Es obvio que lo más sensato es agradecer y construir oportunidades que no solo nos den un helado igual sino uno mucho mejor. Si en tu vida hubo algo que fue pero ya no es; agradece el tiempo que lo tuviste y sigue luchando pues la vida siempre nos sorprende con cosas hermosas.

Pensar en
Lo que puede ser pero aun  no es 

       Si algo tiene el futuro es lo incierto que es, pues no deja de ser más que un pensamiento, una suposición. Si bien es cierto la ciencias probabilísticas algo nos muestran de lo que puede ser el futuro, la realidad es que con cada acto, con cada palabra, con cada decisión, con cada acierto y con cada error, escribimos y reescribimos la idea que tenemos de lo que es el futuro. A veces perdemos tanto tiempo pensando en lo que puede ser pero aun no es, que nos distraemos de los que sí es. Una cosa es trazarse metas, tener sueños y querer lograr grandes cosas, que andar penando que nos deparará mañana. No se trata de suerte, se trata de nuestra capacidad de construir nuestro propio camino. Puede  ser que mañana llueva, puede ser que no; puede ser que si me levanto más temprano llegue a tiempo, puede ser que no. Hay tantas cosas que se nos escapan de las manos que a veces no vale la pena estar sacando tantas cuentas acerca de lo que va a ser mañana, sino mas bien, atrevernos a vivir en el aquí y en el ahora, sentando las bases de lo que será nuestra vida del mañana. Trabajar hoy sabiendo que mañana será la cosecha de lo que hemos sembrado. Muchas personas imaginan conversaciones enteras que suponen que van a tener con alguien una vez que lo tengan en frente; pero cuando lo tienen ahí no le dicen nada. ¿De qué sirvió tanta preocupación en lo que puede ser pero que aun no es? Pues sólo sirvió para cansarse.

Saquemos de nuestra mente esos pensamientos que no nos permiten avanzar, dejemos de vivir en el pasado o en el futuro pues el único sitio donde vivimos se llama presente.